
Anoche estuvimos Ari, Pato, un amigo de ellos y yo, dándonos una vueltecita por la Bodeguita del Medio, ahí nos encontramos con Carlos que andaba con unos amigos. De ahí vinimos pa´la casa a seguir la rumba, pero no tomé fotos de eso, ya andaba medio ida y medio cansada. Igual, otra vez me acosté tardísimo, aunque esta vez sí pude recuperar el desvelo.

Los amigos de Carlos son una pareja de escritores/artistas muy interesantes, aquí estuvimos hablando largo rato de cuestiones muy profundas -no como la inmortalidad del cangrejo, pero sí otras cosas- como de religiones, arte, hasta de fonética y ortografía, en esas hasta bien tarde, y oyendo música, etc, realmente muy chévere el rato.
Ahora ando escuchando música, en este domingo medio nublado, y pensando cosas, sintiendo cosas, con ganas de escribir, han sido días muy intensos estos últimos, y qué bien... tengo mucho que vivir y que aprender (sobre el amor, sobre mi vida, sobre los regalos que llegan (o los ojos que se nos quedan en el alma, tantos ojos!)...)
De eso se trata ¿No? :)
Comments