Sálvame ahora, es urgente que estoy a punto de perder la cordura otra vez y no quiero. Hoy estoy triste, tan triste como seguramente no estaré mañana ni quizás ya nunca, pero hoy volví a sentirme así de repente: así como sola como nula y culpable de todo como si no tuviera nada, ni a nadie. Y quisiera estar contigo ahora y no pensar en él, ya no más porque sea lo que sea no es él, sé que no es con él es otro camino el que preciso es otro mundo el que quiero; tan solo sálvame, de alguna forma, de la que quieras, la que conozcas que pueda refugiarme en ti y no sentirme como ahora porque sé lo que es estar ahí... y no quiero.
(o diario de una vida intensa)